por Stefan Steinberg,
Hace solo dos semanas que el parlamento griego adoptó una nueva ronda de medidas de austeridad que tendrán un impacto devastador sobre las condiciones de vida de los trabajadores griegos. El voto parlamentario tomó lugar luego que varias instituciones financieras, ciertos bancos y un grupo de políticos europeos destacados lanzaran una campaña propagandista para empujar la idea de que las nuevas medidas de austeridad son la única manera de aliviar los mercados de divisas y estabilizar el euro.